Persiguiendo La Oportunidad


Lucas 19:1-4 'Jesús entró en Jericó y comenzó a pasar por la ciudad. Había allí un hombre llamado Zaqueo. Era jefe de los cobradores de impuestos de la región y se había hecho muy rico. Zaqueo trató de mirar a Jesús pero era de poca estatura y no podía ver por encima de la multitud. Así que se adelantó corriendo y se subió a una higuera sicómoro que estaba junto al camino, porque Jesús iba a pasar por allí. ‘ NTV

Siempre estamos en busca de algo

  • Siempre estamos detrás de algo. Siempre hay algo que nos mueve y nos impulsa a realizar cosas para alcanzarlo. 
  • Lucas 19:3 'Estaba tratando de ver quién era Jesús, pero la multitud se lo impedía, pues era de baja estatura. ‘ NVI
  • Ya sea por curiosidad, necesidad, pasión o por alguna otra razón, siempre hay un objetivo que alcanzar el cual nos mueve. 

Zaqueo no tenía necesidad material, era rico. Tampoco era una posición, si bien era despreciado por los judíos (era jefe de los recaudadores de impuestos para Roma), era tenido en buena estima por el imperio Romano, ya que era muy útil. 

Siempre aparecen dificultades

De la misma manera que nos pasa a nosotros, Zaqueo enfrento dificultades para poder acercase a Jesús, nosotros también enfrentamos dificultades. 

  • Limitaciones físicas, sociales, personas que se ponen en el medio para que no podamos tener oportunidades de crecimiento. Siempre los vamos a encontrar

Dios se encarga de que podamos crecer y conquistar. Pero el esfuerzo tiene que ser nuestro 

La oportunidad se presenta para todos, pero solo algunos la arrebatan

 Mt 11:42

Saqueo no encontró a Jesús por casualidad. Lo encontró porque decidió no quedarse quieto.

1. Saqueo tenía razones para quedarse en su lugar… pero eligió moverse

La fe se demuestra en movimiento. No importa cuántas veces fallaste: si hay una nueva oportunidad, ¡corré hacia ella!

2. La estatura no fue excusa, fue una motivación

Dios no te juzga por lo que te falta, sino por lo que hacés con lo que tenés.

3. Saqueo no esperaba que Jesús lo conociera

Jesús te ve incluso cuando creés que pasás desapercibido. Él sabe tu nombre. Y te está buscando.

4. No se quedó con la curiosidad, fue por el encuentro

La diferencia entre ver a Jesús y encontrarte con Él, es tu decisión de treparte a ese “árbol” en tu vida.

5. La oportunidad trajo transformación

No solo vio a Jesús. Le abrió su casa, su corazón… y cambió su vida. El verdadero encuentro con Cristo cambia todo.

APLICACIÓN PRÁCTICA

"Hoy no tenés que subirte a un árbol, pero sí tomar decisiones que te acerquen a Jesús. Tal vez tu árbol es una oración. O volver a la iglesia. O perdonar. O empezar de nuevo. No dejes pasar la oportunidad. Jesús está pasando. Vos decidís si lo ves o si lo recibís."

"¿Qué vas a hacer con la oportunidad que tenés hoy? ¿Te vas a quedar como uno más en la multitud o te vas a mover como Saqueo, a pesar de todo lo que te limita? Si te animás a moverte, te vas a encontrar con Jesús que ya te estaba esperando."