No Es Para Mí

Escrito el 25/08/2025
Christian Schahab

¿Alguna vez sentiste que lo intentaste tantas veces... y siempre terminás pensando: “Esto no es para mí”? Todos pasamos por eso. Nos comparamos, miramos a otros y pensamos: 'ellos tienen todo... y yo nada'. Pero la Biblia nos revela una verdad que rompe con esa forma de pensar. Mira lo que dice Romanos 4:3 sobre el padre de la fe, Abraham: “Abraham le creyó a Dios, y Dios lo consideró justo debido a su fe.” No fue su talento, su apellido o su fuerza. Fue su fe. Y esa misma llave está disponible para vos hoy.

 

TU IDENTIDAD VS. LA COMPARACIÓN

Vivimos en una sociedad adicta a la comparación. Las redes sociales son como un espejo distorsionado que nos muestra las mejores partes de la vida de los demás. Nos comparamos y el resultado es casi siempre el mismo: tristeza.

Dios no te llamó para que vivieras a la sombra de la vida de otro. Él te llamó por tu nombre. Tu valor no depende del esfuerzo que hagas para ser "mejor", sino de la fe que pones en Aquel que ya te hizo justo.

 

EL FUEGO NO TE DESTRUYE, TE PREPARA

Hay una verdad que a menudo evitamos: todos seremos pasados por fuego. Como dice Marcos 9:49, “La sal con que todos serán sazonados es el fuego.” El fuego no es un castigo, es un proceso. Es el horno de Dios donde se nos forma para cumplir nuestro propósito único.

Tu prueba no es para destruirte, es para prepararte. ¿Saldrás quemado o sazonado? El fuego es el mismo para todos, pero el resultado depende de tu respuesta.

 

EL ATAQUE NO ES UN FINAL, ES UNA SEÑAL

Si la voz del enemigo te está diciendo que "no es para vos", te lo digo claro: ¡el enemigo no ataca a quien no tiene futuro! Si te está atacando, es porque tu propósito es tan grande que lo aterroriza. No bajes los brazos. Romanos 4:13 nos dice que la promesa de Dios no se basó en la obediencia a la ley, sino en la fe.
Es tiempo de dejar de pensar que las promesas de Dios son para otros, y empezar a creer que son para vos. Este es tu momento de ir por más.

 

LA DECLARACIÓN QUE GANA LA BATALLA

Hoy, es hora de que dejes de lado la mentalidad de "No Es Para Mí" y declares sobre tu vida lo que Dios ya ha declarado. No importa cuántas veces te caíste o lo que la gente te dijo.
Es momento de levantarte con la fe de Abraham. Con la certeza de que tu identidad en Cristo es más fuerte que cualquier comparación. Y con la convicción de que el fuego que estás pasando te está preparando para algo grandioso.

“Lo que parecía lejos, con Dios sí es para mí. Lo que parecía imposible, con Dios sí es para mí. Porque soy hijo de Dios, y en Él, todo lo puedo.”